Desde luego cuando hablamos de Tuning todos pensamos en realizar modificaciones a nuestro vehículo. En principio esto no tiene por qué presentar un problema, pero según las normativas y leyes, cuando nos ponemos a modificar ciertos aspectos de nuestro vehículo tenemos que homologarlos.
¿Qué es una homologación para nuestro coche?
Una homologación en el mundo de la automoción no es nada más que la certificación de que las piezas que se han cambiado o añadido a nuestro vehículo son seguras tanto para nosotros como para el resto de los usuarios de la vía.
Esto significa que todas las piezas que pongamos en nuestro coche tienen que haber pasado ciertas pruebas o tienen que estar comprobadas para su buen funcionamiento, o incluso para no entorpecer las otras partes del vehículo impidiendo que realizen sus acciones habituales.
¿Por qué tenemos que homologar nuestras piezas?
En muchos casos es simplemente para pagar una tasa, pero en la mayoría de ellos es para poder estar seguros de que las piezas que hemos montado en nuestro vehículo cumplen todas las normativas vigentes, ya que si no lo hacemos estaríamos expuestos a recibir las sanciones pertinentes por dichas modificaciones.
¿Donde podemos homologar nuestro trabajo?
Hoy en día si hacemos nuestras modificaciones en un taller, deberíamos exigir las homologaciones pertinentes, pero en caso de que seamos nosotros mismos los que realizamos las modificaciones de nuestro vehículo, hay muchas empresas que se dedican a realizar este tipo de documentación y nos pueden poner en regla prácticamente cualquier cosa que hayamos hecho en nuestro coche.